sábado, 21 de marzo de 2009

AGUA Y SED



Para lupita

La llovizna cae como puños de tierra sobre mi cabeza; Me despierto y noto que el lado derecho de mi cama esta vacio, sin tu cuerpo, sin tu aroma… sin ti. Significas más que la presencia del que siempre esta ausente. Te recuerdo y te vuelves oreo en mi regazo, penetras mi piel, engañas al alma, decantas tu ser y vomitas el canto de nuestra esperanza.

Mi cabeza cae como tierra sobre el suelo mojado; agua y sed significas tú, y es que te esparces sin completar el tacto, te esparces sin siquiera enjuagar mis labios. Me haces arder como un sol asfixiante que solo me empapa de candor desconcertante, de sed que no me libra de tu prodigioso cuerpo lleno de la humedad soñada, como una isla llena de oasis en medio de un mar irremediablemente salado, irremediablemente descompuesto para mi visión gozosa del amor.

La tierra absorbe el sudor que por lo pronto da cuenta de mi sustanciosa necesidad por ti, de tu inmensidad inconclusa en la que guardo enunciados que se acomodan como el agua en mi cuerpo cuando las palabras toman forma, cuando la sintaxis nos aclara que tu sola presencia desaparece mi sed.

Carlos Vargas

1 comentario:

Anónimo dijo...

Nunca agradecí tan hermosa palabras. Hoy después de mas de 12 años reitero que soy la mujer mas privilegiada por tenerte a mi lado. Te amo. Gracias.